viernes, 25 de septiembre de 2009

La ignorancia no deseada

Me encanta la cara del que no tiene donde caerse muerto, del que no tiene nada que hacer, (de ahí que se pongan a criticar perjudicalmente la condición sexual, el objetivo y el pensamiento de cada uno de los seres,...), del que crítica con ellos, esperando ambos, una contracrónica que nunca recibirán. Es el mayor golpe en la cara que te pueden hacer en pleno siglo XXI, el desprecio, el paso de ti, la ignorancia,...

Nunca algo antes había resultado tan efectivo. Y mucho más ahora que lo prescindible es llamar la atención, ya sea en tu puesto de trabajo, en tu tiempo libre, matando gente (es decir, criticándolas), o quejándose globalmente, que es lo mas parecido a un tocapelotas consentido...

Tambien me gusta ver al que se rodea de amigos fantasmas, por tal de no verse solo, o del que organiza fiestas porque así al menos está invitado. Y metiendo el dedo en la llaga, no todos le dicen que van, que es una bajada de orgullo de esas que hacen daño...
Me encanta el que finge un climax colectivo, en plan a la defensiva, como si así fuera a atacar algo, a solucionar cosas, porque evidentemente, a solas, no podría ni con su propio ego,...

Pero sin duda, lo que mas me gusta es verte a ti, falso, en tu mundo que tu has montado, y has querido. Te rodeas de gente como si eso alimentara tu mentira, la que sabemos todos, la de que nunca estás solo, la de que tienes amigos por convenio o trato,... que triste, y yo que pensaba que eras único en tu especie,...

En tu máximo esplendor, otra vez estoy aqui, para desbancarte de tu fama de hipocresía, vengo a darte mis últimas palabras de odio, para así, hacerte lo que mas temías...

Voy a vengarme de tus patrañas...

Voy a violar tu derecho de réplica...

Voy a fertilizar tu estado ausente...

Voy a a tomar precauciones pa' el día después...

Voy a ignorarte...

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