miércoles, 28 de diciembre de 2011

Inocentes

Para comenzar todo esto, tuvimos que haber tachado mucho. Para terminar todo lo tachado tuvimos que seguir escribiendo. Todo en las mismas páginas. No nos dio tiempo ni a comprar nuevos folios...

En poco tiempo nos cruzamos las miradas y tras un instante de shock, acudimos a la razón para frenar tanta locura vivida... Caímos de una manera tan infantil que se rieron de nosotros astutos vengadores del tiempo e inteligentes sirenas del abandono...

Sin querer queriendo. Es la mejor expresión que define el intervalo de tiempo, en el que te desenamoraste y en el que te volviste a enamorar. Y todo ello surgió entre los inocentes post-it que iban surgiendo de camino a la Universidad, y los innumerables sucesos casuales que iban apareciendo delante de los ojos verdes que nunca dejaré de mentar...

Y llegamos a los días, que anteriormente fueron normales. Nos levantamos, y siempre hay algo que los contempla diferente. Y es que si años atrás las horas iban contándose de una en una y sin ton ni son, ahora las horas marcan la cuenta atrás de lo próximo que nos va a llamar la atención...

Por eso hoy, también debemos marcarlo como un día diferente....

Creo que nunca celebramos este día. Básicamente porque no sabíamos que debíamos hacerlo. No sabíamos que eramos uno de ellos...


Fuimos felizmente inocentes mientras nos gastaban bromas con una seriedad pasmosa. Digna de la Real Academia de Teatro y Arte Dramático. Nos presentaron el amor con forma de "acabable", y nos sirvieron en bandeja las ganas de que las cosas se acabaran, no de que continuasen...

Así que nada, felicidades, porque fuimos inocentes y gracias a eso, estamos los dos aquí,  "recortaos" por la línea de puntos, como si fuéramos monigotes del 28 de Diciembre...

Día de los Santos Inocentes,... como fuimos tú, tus ganas, las mías,...etc...

No hay comentarios:

Publicar un comentario